Santo Domingo
Una capital palpitante
Un viaje a la República Dominicana a bordo de un crucero MSC por el Caribe, Cuba y Antillas significa conocer a fondo Santo Domingo. Terremotos y piratas han borrado gran parte de la ciudad construida por los españoles en el siglo XVI pero, a pesar de esto, su antigua zona colonial ofrece representativos ejemplos bien restaurados de edificios de la época que podréis visitar con facilidad nada más desembarcar de vuestro crucero.
Entre los edificios más importantes destacan la catedral de Santa María la Menor y el Alcázar de Colón, la antigua residencia del gobernador de la isla, que vigila de cerca el Río Ozama. Hace quinientos años Santo Domingo estaba toda incluida en este pequeño barrio que, durante la segunda mitad del siglo XX, ha sido recuperado y ahora está lleno de bares y tiendas.
También fuera de las antiguas murallas, de las que quedan algunos restos y un acceso, la Puerta de la Misericordia, Santo Domingo ofrece a los visitantes rincones fascinantes. Al oeste de la zona colonial y al norte del Malecón se desarrolla el distrito de Gazcue, una tranquila área residencial sombreada por árboles a la que también pertenece el complejo cultural de Plaza de la Cultura. A poca distancia los unos de los otros se levantan hasta cuatro museos: el Museo del Hombre Dominicano, el Museo de Arte Moderno, el Museo de Historia y Geografía y el Museo de Historia Natural.
A aproximadamente 70 km de Santo Domingo se encuentra un famoso destino turístico natural, una cascada tan perfecta que parece de mentira, el Salto de Socoa. Santo Domingo es una tierra de célebres cascadas pero esta es la más cercana a la capital y la más fácilmente accesible de todas; esta excursión MSC en la provincia de Monte Plata os dará la oportunidad de tocar con mano las maravillas del interior cubierto por una exuberante vegetación. Permaneciendo en la costa otra excursión os llevará a Boca Chica, aguas transparentes y arena blanca a solo 40 km de Santo Domingo.